lunes, 31 de diciembre de 2007

El cangrejo de la Sirenita aparece congelado

31/12/2007 Actualizada a las 15:29 PM
Zaragoza. (EFE).- El conocido y popular actor de televisión, el bogavante Cancro, ha sido encontrado congelado en una caja de corcho blanco, junto a la que se cree que era su amante, Linda, procedente de algún puerto de aguas atlánticas. La caja en la que aparecieron fue enviada en un camión a Zaragoza, en una operación de tráfico de almejas, probablemente destinadas a prostituirse en algún burdel de carretera, entre las que se escondía también un besugo fugitivo y una peligrosa banda de cigalas del oeste. No obstante, lo que más conmocionó a los habitantes de la ciudad durante la liberación de las víctimas, fue el hallazgo de los cadáveres congelados de los amantes.

Cancro, con una larga trayectoria profesional, entre las que se destacan sus dos actuaciones más importantes como Sebastian, el cangrejo de La Sirenita, consagrándose como el mejor actor de origen crustáceo, pero sobre todo como Tenacitas, la langosta que aparecía en la serie de televisión Los Simpson, presentaba graves daños neuronales como consecuencia de una continuada exposición a las bajas temperaturas de una cámara frigorífica. Se cree que el hallazgo de los dos cuerpos está relacionado con algún ajuste de cuentas, pero la policía aún está investigando. Nadie del entorno de Cancro y Linda parecía haber echado en falta su presencia estos días, suponiendo quizás, que en fechas navideñas, habrían regresado a ver a sus familias, ambas oriundas del Mar del Norte. Se está interrogando a un amigo de la familia, un pulpo, en calidad de posible testigo, pero no se descarta que en las próximas horas salga a la luz nombre de algún sospechoso.


Cancro, un bogavante (Hommarus Gammarus) de gran tamaño, como se aprecia en la fotografía de los cuerpos junto a un tetra brik de leche, será cocido junto a su amante Linda en una ceremonia íntima, en la localidad donde fue hallado su cuerpo, para evitar que se pierdan sus nutritivas y sabrosas cualidades. Todo el fondo marino lamenta tan terrible pérdida en una fecha tan señalada como es el fin de año.

Cancro en la serie de televisión Los Simpson, en el papel de Tenacitas

viernes, 21 de diciembre de 2007

Veo veo


Qué sensación abrir los ojos y ver. El rostro de la oftalmóloga acompañado por la pregunta ¿Qué tal estás?, recién incorporado de la camilla, aún con los ojos adormecidos después de la sesión. Y es que ayer me corrigieron la miopía. Sí, mi regalo de Reyes fue una operación. Dudé entre ponerme tetas y esto, pero creo que lo de las tetas para más adelante. No duele, es verdad, pero no quita para que estés nervioso. Te tumban en la camilla, con tantas gotas en los ojos, anestésicas y qué sé yo para qué más, que no ves nada, como si estuvieras en mitad de la niebla. Te dicen que no te muevas, y tú sabes que van a abrirte el ojo como una mandarina (sólo la tapa, claro), y escuchas el ruido mecánico de lo que sea que se acerca a tu cara, que en tu cabeza, más clarividente que los ojos en ese momento, es o una afilada sierra de calar o un cortapizzas eléctrico.

- Bzzzz Bzzzzzz - gira el cortapizzas sobre mi cabeza, a la derecha.
-Imposible, no para de oscilar. Por favor, todo el mundo se controla, así que no muevas la cabeza -me increpa la enfermera, molesta porque les hago perder el tiempo.
- Disculpe, pero es que estoy nervioso y no puedo evitar apartarme de eso - respondo.
- ¿No te has tomado la pastilla tranquilizante? - Se oye a la doctora
- Sí, pero hace un minuto, y usted dijo que por lo menos tardaría 20 minutos en entrar después de tomarla.
- ¿Sólo hace un minuto? Bueno no te preocupes, intenta controlarte, de verdad que no duele, sólo notarás una ligera presión durante cinco segundos.

Y es verdad, que no duele. Totalmente cierto. Es más molesto el ganchito para no cerrar los ojos, tipo Naranja Mecánica, que la maquinita dichosa. Se comprende que, sin los efectos del calmante, y ante la perspectiva de una situción nueva, extraña y a sabiendas de que hacer un corte en el ojo es lo que se me viene encima, no es fácil dejar la cabeza quieta y la mirada fijas en un foco deslumbrante; foco que desaparece cuando lo oculta el temido cortapizzas. Y ya está, tres segundos por ojo, para abrirlo, y me llevan a la máquina, lo peor ya pasó.

De nuevo tumbado (así no se puede salir corriendo a gusto de aquí) y con la cabeza bajo una especie de máquina tragaperras. Mira a la luz, será un momentito. Y se ve una luz roja-naranja, el ruido del láser Brrrrrrrrrrrr y huele a fritura . ¿Así huelo? Me entran ganas de comerme un poquito cuando salga de aquí. La luz va creciendo y pasa de ser un puntito en medio de la oscuridad a llenarlo todo de trazos de colores. Dos, tres minutos, no más, por ojo, y me llevan a examinar.

Al fin ese ¿qué tal estás?. Qué alegría, mujer, de verla de nuevo, de verdad. Si fuera usted guapa le daría un beso. En cambio, la primera imagen es, como el mundo real, antierótica. Ese traje verde y ese gorro de cocinera de colegio no le sientan bien. ¿Qué pasó con las enfermeras del Doctor Mariano Ozores? Nada, cada día me gusta menos el cine español, me decepciona constantemente.

sábado, 15 de diciembre de 2007

Concierto

Para terminar de rematar esta soberbia semana, el viernes, que dormí a pierna suelta después de la cena en el Churrasco con los compañeros de trabajo, donde fui obsequiado con el día libre, fui de concierto. Y fui de concierto, pero gratis.




El fin de semana, durante el puente, en la página web de Mondo Sonoro, se anunciaba el sorteo de cinco entradas para un concierto en la sala Oasis. Entre que ya era fin de semana, y que caía en puente, las posibilidades de que me tocase una eran bastante elevadas. En efecto, unos días después, me anunciaron por correo que me había tocado una de las cinco, y que mi nombre estaría en la lista de entrada. Sí, nenes, diciendo soy fulano de tal, estoy en la lista, me dejaron pasar ante los modernos con vaqueros a la altura del culo y patillas extralargas que apoquinaban sus dieciocho euros por no haberla sacado en el cajero, que es más barato.


Media hora de teloneros locales, De Vito, que me gustaron mucho, mucho, mucho. La pena es que todavía estábamos cuatro gatos, con la primera cerveza en la mano y, en mi caso, estaba solo para ponerme a saltar unas canciones totalmente bailables.


El segundo grupo también me lo tragué solo, durante una hora, Triángulo de Amor Bizarro, el grupo por el cual me decidí a participar en el concurso, y que me parece de lo mejor que he escuchado últimamente. La pena fue que la voz, de modo aún más exagerado que en el disco, apenas se distinguía de entre la contundencia de su música. Aquí sí que canté, y sí que bailé, a pesar de estar sólo. Las dos chicas de al lado de la columna en que estaba apoyado se sonreían al verme, pero, honestamente, cualquiera hubiera hecho lo mismo en caso de ver a un grupo que a uno le gusta (y se sabe las letras, claro).


Dos cervezas más tarde, una visita a los servicios, y un cubata en vaso de plástico (sic) en mano, La Habitación Roja subió al escenario. Medio panorama indie de la ciudad pululando sobre y debajo del escenario. Entre otros vi a Tachenko, por ejemplo, casi al completo, alguno trabajando, y algún otro tomando copas y quitándose el abrigo, cigarro en boca, sin soltar el vaso ni tirar una sola gota, delante de mis narices. Al fin vino la única persona a la que pude engañar, a pesar de llegar a las 23h recién salida del trabajo, y pude acercarme al escenario ¡oh sí! y cantar y bailar sin levantar sonrisas sospechosas. Canciones del último disco (me quedo con París ardiendo) y temas anteriores (no imaginaba que sonaría tan bien La Edad de Oro en directo, rodeado de gafapastas sobreexcitados). Qué lejos queda la época en la que Jorge se compraba los primeros discos, o cuando le regalé Largometraje sin tener ni idea de si le gustaría o no, porque a mí, aquello de la Habitación Roja, me sonaba a algo comunista, rock rancio de calimocho y puño cerrado. Casi, casi. Mi acompañante no conocía ni al grupo, pero le encantó, lo que es un alivio, porque el concierto fue largo. En una segunda visita al servicio, al pasar por la entrada, me compré el disco mientras los dos varones de TAB se tomaban una merecida copa, y comentaban que los dibujos del refrito de Mushroom Pillow eran del baterista. Puro arte con los Alpino chaval.

miércoles, 12 de diciembre de 2007

Caramelo


Cómo voy a echar de menos el 2007.

martes, 11 de diciembre de 2007

Con el mazo dando


Primer día de trabajo: simplemente maravilloso. Esto de que la vida universitaria es mejor, es una patraña. Me acogió mi jefa nada más llegar, a las 9, hora totalmente de colegio, y me llevó a una sala de reuniones que había reservado para mi recibimiento, y me explicó en qué parte de la empresa voy a estar. Es amiga de mi tutor, del que no sabía que salió la recomendación de mi CV, ya que pasó a través de varios intermediarios antes de llegar a sus manos, y tenemos más conocidos en común. El mundo es un pañuelo. Sólo con verla y escucharla se ve que esta mujer es simplemente encantadora. Estuvimos hablando de la rapidez con la que habían gestionado su solicitud de un becario en prácticas y mi incorporación, antes de lo que ella habría pensado, con lo que no tengo aún ni mesa ni ordenador, por tanto, tampoco tengo cosas que hacer. A efectos prácticos la beca comienza a contar a partir de hoy, pero mi trabajo no empieza hasta la semana que viene.
Me presentó a las personas con las que tendré que trabajar (a algunos los acribillaré a preguntas por trabajar en algo que me molaría conocer más) dejando por último a mi compañero directo. Dos años mayor que yo, de mi antiguo colegio y de la misma universidad, con increíbles e insospechados conocidos en común. Otro que fue encantador desde el principio. Se pasó toda la mañana explicándome qué es lo que hacen, cómo, qué programas usan, etcétera. No sólo explica bien y tiene paciencia, sino que encima me invita a hacer una pausa, fumar un cigarro y charlar. Tiene una foto de los Who en el fondo de escritorio y cierto look indie¡Qué más puedo pedir!
Pues todavía más:
- Tómate la tarde de hoy y mañana libre, porque para mañana no podrás tener todo instalado. El miércoles y el jueves tenemos viaje a Barcelona, así que tampoco vengas, porque estarías tú solo. Pero, escucha, el jueves tenemos cena de Navidad, si vienes conocerás mejor a todo el mundo ¿no?
- Oiga, no sé, ir a la cena de Navidad cuando no llevo ni una mañana, igual es un poco pronto
- No no, de verdad, mira, voy a llamar a la persona que reservó y que te añadan. Y claro, como tenemos cena el jueves, igual el viernes no hacemos gran cosa y nos vamos a visitar las obras de tal en vez de estar aquí.
Horario de 9 a 14h, y de 16 a 19h, con posibilidad de recortar el viernes, oficiosamente, de 8 a 15h. Para ir a mi colegio, de pequeño, que estaba más lejos, madrugaba más. Sólo les faltó darme una piruleta, pasarme la mano por la cabeza y preguntarme qué les he pedido a los Reyes Magos. ¡Les he pedido que no me despierten!

viernes, 7 de diciembre de 2007

Apurando el limbo


Se acaba mi estancia en el limbo, ese período abstracto entre el depósito y la defensa del proyecto. Se supone que durante este tiempo debería haber buscado curro, retomado el inglés y haber viajado un poco. No es un trabajo propiamente dicho, pero tengo los próximos doce meses ocupados; lo del inglés, ejem, vi el otro día León el profesional en versión original, pero he decir que cuando me la puse creía que estaba doblada en francés; y los viajes se han reducido al finde a Jaca-Panticosa-Canfranc, qué novedad. Al menos hice un curso de ética en la empresa de tres semanas, bastante majo, aunque derivado de la fiesta fin de curso que hicimos ,acabé prometiendo que me apuntaría a clases de baile. Es de esa clase de cosas que cuando te las proponen respondes que ni borracho, pero tres gin tonic después dices que sí, que te apuntas a clases de salsa y de hula-hop si no coinciden en horario. Joder, cómo me pierde la boca, el alcohol y la boca. Y es que tengo una lista de compromisos verbales derivados del uso y abuso del alcohol similar a la de un político en campaña.

Hoy he comprado una botella de ron Barceló, aprovechando el regreso de Héctor el errante, y pensaba compartirla con él y con Álvaro el recién llegado, pero creo que tiene un lío de faldas o no sé qué. En la caja anunciaban que de regalo venían seis vasos de fiesta, que luego han resultado ser seis simples vasos grandes de plástico. Sin lugar a duda como reclamo para hacer botellada (que no botellón, que es palabra de otras tierras, y uno de estos días alguien debería escribir a los periódico locales para corregirles el término) porque nadie necesita vasos de plástico para beber en una casa, donde el vidrio y el hielo no deberían escasear jamás (propuesto como nuevo Art. 56 de la Constitución, Título I, de los derechos y deberes fundamentales, ahora que está de moda cambiar estas cosas, seamos prácticos).

Ayer fui con una amiga al XII Festival Nacional de Jóvenes Realizadores Ciudad de Zaragoza, a ver uno de los pases de vídeo que concursan. 8 vídeos, alrededor de hora y media y entrada libre, y sin embargo medio aforo del Centro Cultural estaba vacío. Descontando a la prensa, los realizadores, familia y amigos ¿cuántos de los presentes se consideraban no relacionados? Qué pena. La próxima vez que me queje de que la oferta cultural de esta ciudad es menor que en otras debería pensar que quizás hay mil cosas mal o no publicitadas. No me creo que seamos tan dejados conscientemente. O eso quiero pensar.

De los vídeos me quedo con el más breve, de tres minutos, que me fascinó por el regusto que me dejó tras verlo. Idea y vídeo me gustaron. Cinco puntos y mucha suerte, a ver si ganan algo más que amigos, para variar. Además, creo que a alguna que conozco le habría molado el protagonista, el de la gorra que sale en el link del festival, y que era también uno de los creadores. La única pega es que fui sin cenar, y me hubiera comido la cabeza del tipo de delante, realizador y concursante, por cierto, así que el campero con hamburguesa de después cayó en cuestión de minutos.


El lunes a las 9h preguntaré al guardia de seguridad por M.T.G. y saldré del limbo. Pero hasta entonces, aún tengo tiempo para prometerle a Héctor por enésima vez que iré a Asturias en un futuro próximo. Sólo necesito un par de Barcelós, porque donde hay confianza… pues eso.

lunes, 3 de diciembre de 2007

El Ying y el Yang

El principio y el fin. Aún no he terminado una cosa y ya empiezo otra. La fecha de defensa sigue sin publicarse, y el lunes que viene estaré embarcado en nuevas actividades. Cuando algo empieza necesariamente hay algo que se acaba por otro lado, pero no deberían solaparse ¿o sí? Bueno, eso allá cada cual, casi mejor no padecer períodos de inactividad. Mi casero me cambió a la media hora de abandonar el piso, ¿cómo me habría sentado saber que el nuevo inquilino llevaba esperando media hora antes del momento de entregar las llaves? Quizá no sea lo mismo, o sí, después de todo, pero en verdad ¿qué más da? A veces las cosas sólamente son así, y pensar demasiado en ellas no lleva a ningún sitio.
Sólo digo que unas vacaciones tampoco hubieran estado mal.

jueves, 29 de noviembre de 2007

Universidad

Estoy acabando la presentación del proyecto, la que haré ante el tribunal. Es mi último trámite antes de ser ingeniero y me cuesta bastante darme cuenta en qué punto estoy. Cuando pienso en el tiempo, siete años y tres meses, me parece una barbaridad, pero recuerdo perfectamente el primer día de Universidad. No es raro, habida cuenta de que también recuerdo el primer día de COU, el primer día de BUP en un nuevo colegio, el primer día en el Instituto de Francés, con unos 11 años, incluso ciertas cosas del primer día de 2º de preescolar en mi primer colegio. Me sorprende cómo hay cosas que no se olvidan.

Recuerdo cómo el primer día, durante mi primera hora de Universidad, el profesor de Álgebra pronunció su solemne frase, quizá repetida en las facultades de ingeniería de medio país, humor del profesorado, de ese que comparten en los simposios, los congresos y las conferencias, que decía:
"Mirad al de vuestra izquierda, mirad al de vuestra derecha, pues al año que viene sólo estaréis uno de los tres". Hubo risas nerviosas. Jajaja, qué sentido del humor tiene este señor. Y es que había que verle, María Teresa Fernández de la Vega en hombre, lo que menos le pegaba era contar chistes o sacarse conejos del sombrero. Pero el vaticinio fue de una precisión pasmosa: Al año que viene no estaba ni el de mi izquierda, ni los dos de mi derecha, en una fila de seis asientos, en la que estábamos sentados cuatro. Glups.
Mi primer examen fue de Dibujo Técnico (que por cierto aprobé, aunque no repetí tal situación hasta julio). El último día de clase, a las 8:50 de la mañana, nuestro profesor se despidió con un
"Que tengan suerte en la convocatoria. En la primera, en la segunda, en la tercera..." Y se fue.
Y así pasaron los años, y los exámenes, y las prácticas, y las pochas, los cafés, las horas de biblioteca, y las fotocopias de apuntes, de exámenes, de ejercicios resueltos, y los bocadillos por la mitad, las canciones de la tuna el día de las asociaciones, los Welcome Packs, las chuletas en la HP, los guiones de otro por tus manos, y los viajes del edificio A al B y al C antes de que tuvieran nombres. Ya no más.
El día 10 empiezo prácticas en empresa y seré alumno de una nueva Universidad. Raro, raro, raro.


Oostende, Bélgica. Abril 2007.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Rue Vergnies 6. (Antes y después)

Encuentre las diferencias...

La casa de Guillermo, Rue Vergnies 6, antes de la fiesta. Alrededor de las 22:40 de la noche.

La misma casa después de la fiesta. Hacia las 5:30 de la mañana

Solución: Los apuntes de Cyril sucios, latas medio bebidas con ceniza dentro, un par de vasos rotos y un portátil menos en alguna de las plantas inferiores.

martes, 20 de noviembre de 2007

Tomavistas del Erasmus

Cuelgo los primeros vídeos del Erasmus. El primero creo que es uno de los mejores que tengo, y me lo parece incluso sin tener sonido. Por supuesto, en casa de Guillermo. Qué nostalgia. Todavía puedo recordar la voz de todos, pero veremos por cuanto tiempo :S

Me veo obligado a añadir uno de la visita de Carlos y Nacho. El alegre despertar de Nacho contrasta con el apacible apego de Carlos a la alfombra y al saco de dormir. 18 de febrero

Hoy es el día de la Saint Verhaegen, por cierto, la fiesta del patrón de la Universidad francófona de Bruselas. El año pasado nos echamos a la calle, bebiendo por el centro de la ciudad entre camiones con música y dispensadores de cerveza. Una Love Parade en guarro, con alcohol en abundancia (en vez de pastillas de diseño) y música de su padre y su madre. Llovió todo el día, calabobos, y hacía frío, pero creo que nos adaptamos bastante rápido al medio. Si los belgas (por el momento aun lo son) salían de fiesta, nosotros también.

Vídeo raro de los que tengo: de fútbol. Düsseldorf-Dresde. Un par de tarjetas amarillas, un lesionado en el borde del campo, nazis del este al fondo, y un pésimo saque de puerta. Esto es lo que vi en mis primeras horas en el país...

domingo, 18 de noviembre de 2007

Revolviendo en la sección de discos



¡Acabé el proyecto!
Lo he titulado “La historia interminable”, pero no puedo obligar al tribunal a leérsela. Es sólo cuestión de días que defienda las venturas y desventuras de las interconexiones eléctricas europeas, y entonces, al fin, desde el aparcamiento, podré hacer un corte de mangas a la facultad, disfrutando de la situación. Son muchos años de amorío con la Universidad, demasiados. Aún he de resolver ciertas cuestiones con Secretaría, cómo no, antes de depositar, pero es que hay cosas que funcionan mal desde el primer hasta el último día. Por mucho que la fachada del edificio sea nueva, sigue habiendo manzanas podridas dentro.

Puedo retomar el blog, o lo que es lo mismo, a tener ganas de sentarme delante del me ordenador a perder un poco el tiempo, ya que después de un largo día apantallado no me apetecía contar nada, la verdad (tampoco tenía grandes cosas que contar).

Ayer volví a la Fnac, ya hacía tiempo, a tocar con mis manos media sección de discos, desear unos cuantos, odiar su precio (el nuevo de !!! todavía vale 18,25€) y decidirme por dos que ya tengo en el ordenador. Sé que hay gente que piensa que esto es idiota, y puede que tengan razón, pero si me gusta mucho un disco me gusta tenerlo (aunque a veces descuiden un poco el libreto). Hay quien piensa que coleccionar cedés es mucho más feo que coleccionar vinilos, y puede ser incluso a la larga peor, porque no sabemos si los discos compactos resistirán el paso del tiempo como sí que lo hacen los discos antiguos, pero no es cuestión de eficiencia. Por un lado, no tendría ningún sentido solicitar un disco de Kaiser Chiefs para escuchar en el salón de tu casa, tocadiscos mediante, cuando la tecnología de reproducción de los discos compactos es indudablemente mejor: sería anacrónico y estúpido. Y por otro lado, está la vida del disco. Si los discos van a durar veinte o treinta años antes de borrarse ¿qué pasa? La música que coleccionas, la que te gusta, forma parte de tu carácter, de tus aciertos y equívocos a la hora de comprarla, es parte de tu vida, pero ¿por qué legarla? ¿a quién? Durante años has ido escuchando, deseando y adquiriendo obras, pero no puedes sustituir todo ese proceso dando una caja con quinientos discos a otra persona. La música queda, pero el valor que tiene la configuración, la recopilación de esos discos se pierde cuando están todos juntos, de la misma manera que no vale igual una carpeta con 100 archivos mp3 que un disco original de diez canciones. Y es que, como en todo, el esfuerzo realizado por conseguir algo, en este caso económico incluido, siempre da más valor a las cosas. Aunque se borren dentro de diez años.

Y así las cosas, me compré el último de La Costa Brava, Velocidad de crucero, y el último de Deluxe, Fin de un viaje infinito. Tanta perorata del valor del disco original para descubrir que, al sacar el disco de la caja, un mensaje en letras diminutas rezaba:
“Gracias por comprar esta música y apoyar a los artistas, compositores, músicos y a todos aquellos que han hecho posible su creación. Por favor, recuerda que tanto la grabación como el diseño gráfico que la acompaña, están protegidos por la legislación de propiedad intelectual. Dichos derechos no son de tu propiedad, por lo tanto no debes distribuir esta música. Por favor, no utilices los servicios de Internet que promueven la distribución ilegal de música protegida por la legislación de propiedad intelectual, ni regales o tomes prestadas copias ilegales de discos ya que perjudica a aquellos que la crearon. Es sería igual que robar un disco en una tienda. La legislación en vigor establece duras penas para la reproducción, distribución y transmisión digital de grabaciones legalmente protegidas”.

Me he comprado el disco porque lo he escuchado gracias a los servicios de Internet que promueven la distribución de música protegida, no estoy de acuerdo con que sea ilegal, y me ha gustado. Si hubiera hecho eso con el anterior disco de Deluxe, en vez de pedirlo para Reyes, juro que nunca me habría comprado tanta mierda envasada en formato caro y pequeño (“los jóvenes mueren antes de tiempo”, Xoel, que profundo y transgresor, juventud y muerte, ideas enfrentadas ¿eh? directo a las campañas de publicidad de la DGT). El hecho de pedir que no regales una copia de un disco es como pedir que no prestes un libro (como raramente se leen dos veces, es como hacer una copia ilegal permanente) y ahí, esta maldita panda de usureros hijos de perra (he vuelto al blog con ánimo) osan compararnos con ladrones:

“DELUXE en tu móvil:
Envía un mensaje al 7484 con el texto correspondiente a la canción elegida:
Colillas en el suelo: COLILLAS
Rostro de actriz: ACTRIZ
A un metro de distancia: DISTANC
Coste del mensaje 1,2€ (sin IVA) + conexión WAP según operador. Número de mensajes necesarios 2. Válido para móviles compatibles. Atención al cliente: 902 876 212”

Escrito en el disco con toda la cara del mundo. Sobrevivirá incluso al borrado del cedé. Me lo habéis estropeado. Hijos de puta.

domingo, 4 de noviembre de 2007

Portavoz

Llevo muchos días ausente por cuestiones técnicas. Estoy todo el día con la redacción del proyecto, que debo enseñarle al tutor el día 9, y no ando sobrado de tiempo, pero las razones para interrumpir este descanso forzoso son también de urgencia.
El vídeo que he recibido de la portavoz de un partido en las Cortes de Aragón, cesada al día siguiente de su primer día de trabajo, supera todas mis fuerzas. Me duele que esto suceda, pero duele más que suceda en un órgano de gobierno de mi tierra. Millón y medio de víctimas, ahí es nada.
La gran amazona de la política no aparece en ese puesto por arte de magia ni usando un teletransporte de los Jetson, sino que habrá tenido una trayectoria de partido, en la cual ha tenido una serie de competidores hasta destacar, por fin, por encima de los demás (vamos, digo yo) y merecer la asignación, efímera, de este puesto. He encontrado el vídeo entero, en el que llama cariño mío al presidente de la Cámara, y el currículum vitae de semejante espécimen político. Por cada cargo que ocupa me recorre un escalofrío y se me sacude el alma. Cada día estoy más convencido de que los políticos que me gobiernan son una panda de tarados e imbéciles, donde vale más el amiguismo y el peloteo que la capacidad y los méritos, donde importa menos una formación adecuada que saber tocar las pollas que hacen falta, y donde priman más cosas tales como ser marica, inmigrante, zurdo, guapo, mujer, pulpo o de Vallecas que serio, honesto o responsable.

"Isabel Teruel Cabrero, Grupo Parlamentario Socialista (GPS).
Nació el 20 de febrero de 1965 en Zaragoza. Es licenciada en Psicología y técnico superior de artes plásticas y diseño. Es miembro de la Ejecutiva Regional del PSOE.
Cargos desempeñados:
Diputada del Grupo Parlamentario Socialista por Zaragoza
Desde 21.06.2007:
- Miembro suplente de la Comisión de Economía y Presupuestos
- Miembro titular de la Comisión Agraria
- Miembro suplente de la Comisión de Industria, Comercio y Turismo
- Miembro titular de la Comisión de Educación, Cultura y Deporte
- Miembro titular de la Comisión de Asuntos Sociales
- Miembro suplente de la Comisión de Ciencia, Tecnología y Universidad
- Miembro titular de la Comisión de Sanidad"

¿Cómo puede suplir a alguien en la Comisión de Economía y Presupuestos una que dice que las partidas presupuestarias son algo grande e intangible y que no se sabe cómo valorarlas?
Muchas gracias, muchas gracias, muchas gracias. Maldita sea la gracia.

jueves, 11 de octubre de 2007

Todos Heroinómanos

“la música me abre secretos
que ahora están dentro de mí”

Llenazo en la Romareda. Dos horas y media de concierto. De Héroes, sin telonero alguno. ¿Para qué? Nadie iba a acordarse de nada de lo anterior. Había que dejar sitio en la memoria para empaparse de cada gesto, de cada estribillo, de cada paseo por la pasarela entre el público, de las trayectorias de baquetas y púas, que como siempre, le tocan a otro afortunado desconocido.

Ronda de calentamiento de cerveza y copas en casa de mi hermano antes de ir, mientras en el exterior llovizna y tememos lo peor. Al final, el cielo se portó y sólo cayeron unas gotas. En los alrededores del estadio nos juntamos con más gente y entramos. Hubo un momento de tensión cuando vimos que habíamos entrado por la parte del fondo y no se veía separación alguna entre la zona preferente y la normal. Vimos la valla, enseñamos nuestra pulsera que nos identificaba como guays del Paraguay y pasamos.

Pillamos un sitio más que aceptable a la izquierda de la pasarela, bastante cerca del escenario, y equidistante con la plataforma central. Cerveza cara, bastante, para ser sólo Ambar (cuando cuesta 7’5€ un vaso de cerveza: sólo es Ambar). No obstante, sacamos unos cuantos litros.

Ni sé cuántas fotos hice. Bueno, sí que lo sé, pero no lo digo. El caso es que, como imaginaba, muchas fotos serían para eliminar por borrosas o por sosas, pero me ha quedado una más que aceptable colección de fotos de la noche (que venga la SGAE que se las enseño). Pero lo que está de coña es el vídeo, sin sonido, pero te partes el culo viéndonos a todos cantar y saltar (sobre todo alguno). Y es que no era para menos, el concierto fue… digamos que fue el concierto. Tengo ahora muy difícil identificar el mejor concierto que he ido, pero creo que compararlo con el de los Who y uno de los Rolling Stones habla muy, muy bien de la noche. Emotivo especialmente para Héctor, :P, que era la primera vez que entraba en la Romareda y saltó al campo (o lo que dejaron de él, ejem, que hubo quien se llevó césped).

Nos tomamos después una ronda de sidras, tirada por todo quisque (y por todas partes), en Gran Vía. Nos fuimos a una fiesta de Héroes del Silencio, en la que no había ni un alma, pero las copas costaban cuatro euros, y cuando acabamos embotados, perdí una lentilla y nos quedamos sin pasta, volvimos dando tumbos a casa. Primera noche de cuatro superada. Pintan bien estas fiestas…

lunes, 8 de octubre de 2007

Fiestas: en modo valeriana

El sábado se inauguraron las fiestas en honor de la Virgen del Pilar de 2007. Mal asunto, puesto que este año tengo faena que realizar y las tentaciones no son pocas. De todos modos, hasta el concierto de Héroes del Silencio, todo está vedado para mí. Me consuela saber que estoy en la Universidad y no había mal número de coches en el aparcamiento y de gente en los pasillos. Y es que, como muy bien les explicaba a Loic y Helène ayer, salir nueve días consecutivos te quita un año de vida (si no acaba con ella) y el presupuesto que te queda para los fines de semana de octubre y noviembre.
Nos fuimos a la búsqueda de actividades en la calle con un programa de bolsillo. Lo malo de este programa es que es bastante escueto en sus descripciones, con lo que "teatro en la calle" es un término incierto, que incluye, visto lo visto, actuaciones para niños y una especie de baile sensual en la calle durante una hora. Sé que duró una hora porque nos sentamos en una terraza en la plaza de San Pedro Nolasco, quizá una de las cosas que más me convence en estos días en que trato de olvidar y esquivar que la gente se dedica en cuerpo y alma a noches destroy. Sobre todo en cuerpo.
A las 19h (19h15, impuntualidad aceptable) había timbalada-batucada brasileña itinerante desde la calle Alfonso. Estos no tenían muy claro que narices es eso de timbalada, por más que me empeñé en simularles un concierto con silbatos y bongos, pero pareció gustarles cuando empezaron. Bueno, a ella sí, pues bailaba y seguía la coreografía que recaía en el público. Él me parece que no se va a hacer un fanático del tema, pero le gustó ver algo nuevo y realmente muy animado. Yo no es que me emocione, pero me recuerda a las actividades del Erasmus en Bruselas, salvo que con los normandos hablo mucho más francés que con los de allí. ¿Nadie se acuerda de la Nuite blanche del 29 de septiembre? Por aquel entonces Javi sólo era el vecino español del piso de debajo de Guillermo, el que vivía con dos belgas que espiábamos Miguel Ángel, Sergio, Guillermo y yo desde el balcón.
Hamburguesa, vino, paté francés y sesión de cine para cerrar el primer domingo de fiestas. Ya teengo ganas de que llegue en miércoles a las 21h. Pero hasta entonces, Excel será el programa de mis fiestas.

jueves, 4 de octubre de 2007

Inauguración

Desde ayer, miércoles, queda oficialmente inaugurada la noche de los jueves como "Noche de Cena en casa de Bea". Por ende, el viernes es el día oficial de "Bea friega los platos que ensuciamos anoche". Ya no tenemos nada que envidiar a esa noche del martes del Telepizza que hace Carla con sus compañeros de piso en Madrid.

Según la anfitriona, cada noche nos prepará algo distinto y de su invención. Y aunque soy de buen comer, eso no quiere decir que no vaya bien merendado, por si las moscas. Que eso de 'de mi invención' entraña cierto peligro, y aunque se diga lo de desayunar como un príncipe, comer como un rey y cenar como un mendigo, estoy seguro que cenar sólo un tetra brik de vino no es mi sueño.



PD: Como no tenemos fotos de la noche, han caído tres fotos de cenas en Bruselas. Joder, he visto fotos de mi acogedora casa/caja de zapatos y me da una pena terrible. Lo único que no echo de menos es el somier de mierda, el radiador eléctrico como calefacción, la ausencia de ventanas, la ducha portátil, la cocina eléctrica de dos fogones y sin campana extractora, las sillas modelo dolor de espalda, la pared desconchada, bajar a la lavandería cada vez para lavar la ropa, las escaleras hasta el cuarto piso (aunque con la altura entre pisos parezca un sexto), la lámpara de escasa iluminación y altura tan baja como para golpearte en la frente, usar el fregadero como lavabo, la sensación de humedad cuando llueve, el congelador edad de hielo, guardar la basura de una semana porque dormiste fuera el día que tocaba sacarla y la falta de espacio en general. Pero todo lo demás, lo echo de menos.

sábado, 29 de septiembre de 2007

Cáscatela


Cáscatela, la saca entera de almendras que han traído de Soria, y puedes tardar una semana. Aquí estoy, con el mango bien cogido, venga a cascar con cuidado, no vaya a ser que me dé un martillazo. La verdad que haber llenado primero un bote, y en la hora de la siesta un segundo, es de campeones.

viernes, 28 de septiembre de 2007

La cucaracha


Ayer estaba prevista una velada tranquila en el J. S. Bar, tomando una cervecita y quizá, disfrutando del algún monólogo como había antes. No obstante, los planes se trastocaron en el momento en que Helène me envió un mensaje muy peligrosoa las ocho de la tarde.

"Hola!que tal?tienes ganas de hacer un otra fiesta erasmus con cerveza y chupitos gratuitos esta noche?hasta luego"

¿Hasta luego? Presumo que sin habernos visto en una semana está convencida de que voy a cancelar mis planes previos y me voy a unir a tan descabellada proposición. Pues hace bien y tiene razón, ya que llamo a Bea para que venga y conozca a los franceses. Así que nada, Loic, Helène y yo, pedimos la primera cerveza de la noche en el Bedel. La PRIMERA porque fuimos los primeros en entrar en el bar. Maldita puntualidad extranjera. Y no termino de entender muy bien por qué, pero la cerveza sigue siendo gratis. Sé que lo dije la semana pasa, pero cada vez que pido un vaso de plástico creo que estoy robando o, aún peor, temo aficionarme a tanto agasajo y hacer fila un Jueves Lardero para que me den longaniza o el día de San Valero un pedazo de roscón. El caso es que esto acaba pronto, así que cuando acaba, te pides un espirituoso de Santa Teresa con Coca Cola (malo el juego de palabras:lo sé).

Se apuntaron Bea, una amiga suya y la sorpresa del último momento, recién venido de Huesca, Sergio. Cuando sonó la bocina, el camarero puso chupitos gratis en la barra. Estábamos bien advertidos, así que nos plantamos delante suyo a recoger los pequeños vasitos de cristal. Fuimos, además, ganando regalos de la promoción de ron (bandolera y, al fin, camiseta de chico, que el monedero y el bolígrafo chungo del jueves pasado ya están en la basura) hasta que la achispada Helène nos convenció para ir a La Cucaracha. Parece ser que un amigo suyo vino por estos lares el año pasado, y ése era su bar favorito, así que la esperanza que en él depositaba era muy alta.

¿Cómo se llama el chupito oscuro que prenden con una llama? ¿No es eso una cucaracha? El caso es que siguiendo la tónica habitual, mi mechero no funcionaba, y Bea y yo nos encendimos el cigarrillo con la llama del chupito antes de tomárnoslo. De toda la noche, me parece la imagen más representativa de nuestro estado. Si nos sirven el agua de un florero y nos dicen que se llama Sacarino nos tomamos una ronda con una sonrisa en la cara. Había gente de todos los colores: estudiantes autóctonos y de intercambio, macarrillas y chulipiscinas, algún que otro con pintas de Lebowsky, repetidoras de bachillerato de la ESO de más de 20 años. Un ecosistema poco sostenible a la luz del día. Pero de noche, todos sacamos ¿lo mejor? que llevamos dentro.

Como colofón, el agradable despertar de los bomberos que paran en tu calle, en la casa de al lado. Joder con esta calle. He tenido ya a los bomberos debajo del alféizar de la ventana cuatro veces. Yo me planteaba dejar a un bombero en la esquina, que no ganamos para disgustos.

viernes, 21 de septiembre de 2007

Boda, especuladores y Erasmus

El sábado por la mañana, mientras los ex-Erasmus de Madrid reposaban el cuerpo después de una noche de fiesta en la que pinchó Javi, yo me travestía de joven elegante para ir a la boda de mi prima (ver fotos aquí abajo). La música de la ceremonia la daba un grupo de estupendas rocieras de cincuenta años (ñam ñam, cómo me ponen esos lunares) dándole un aire de boda Farruquito que no me esperaba la verdad. Tómate una Salve rociera a las 12 de la mañana que ya verás qué bien entra (al rocío yo quiero volver, a cantarle a la Virgén con fe, con un olééééééé). Y ariquitáun, táun, táun.
Hubo un problema al poner la boda en Cuenca a las 12, con un cura que tiene ganas de hablar más de la cuenta, con un reportaje de fotos familiares después y el banquete a las 14h: que a las15h30 aún no han llegado los novios, los camareros están en sus puestos de salida, y en cuanto pisan la sala ¡zas! bajan la bandera de salida y todos a repartir los platos. ¡Zas! entremeses ¡zas! vino hasta arriba, que no falte ¡zas! y¡zas!¡zas! tómate el pescado con la carne y empújalo con el sorbete de Danone (parecía un yogur) ¡zas!¡zas! dile adiós a la tarta, que ya te traen el café, la copa y el puro. Cuando llega el baile y la barra libre estás tan atascado por dentro que o vacías o allí no te cabe un gin tonic ¡con el gas que tiene igual explotas!.
Estuvo bien, además del banquete exprés que fue para todos, que a los primos hermanos nos pusieran en la mesa más alejada de todo y de todos. Esta era una de esas bodas a las que hay que ir por compromiso, y punto. No es grave, es más, me parece perfecto. Ni siquiera me importaría no ir, ni me enfadaría porque no me inviten. Si total, luego la parte de familia de Bob Esponjas vamos a ser tapados con una columna como la Torre de Pisa para que los felizmente casados no tengan que cruzarse con nuestras miradas y todos nos preguntemos ¿qué carajo hago aquí?.

La noche se arregló con una visita al nuevo Brit (y sigo añorando el viejo, otro rollo menos hiperguay como el que hay ahora) donde pinchaba el batería de Sidonie (tengo autógrafo) y las copas de Tanqueray con tónica valen tres euros hasta las dos. Increíble pensar que hace unos meses un vaso de medio litro de cerveza costaba 2'40 en Tavernier...

El domingo (felicidades Javi) fui a Madrid a hacer un curso del mercado eléctrico (lunes, martes y miércoles). Conseguí que mi central térmica vendiese a precio regalado (por debajo de los costes de producción) durante unas pocas horas (con los costes de arranque-parada que tiene eso) en el mercado diario. Afortunadamente, en el mercado de ajustes (intradiario) en el que pensaba comprarle a alguien su energía para poder detener mi central y minimizar las pérdidas al no tener que arrancar-parar, pude comprar la cantidad de energía que me había comprometido a producir más barata. Conclusión: Ni siquiera pongo en marcha mi central y estoy cobrando dinero. Especulación, en toda regla, en el mercado. Luego me apagaron el ordenador, me quitaron mi central, mi dinero y la ilusión, no sin darme el diploma de asistencia más soso del mundo.

Comí con Rafa los tres días, y también con Julio el martes, en un viaje en el que me he dejado un anillo, una toalla y muchas horas de sueño. Sarna con gusto no pica :P


En el bus camino de casa, mis nuevos amigos Erasmus me dicen que han vuelto, que hay fiesta Erasmus, que si sé donde están los bares. Cerveza gratis hasta las doce y media, y digo gratis, con todas las letras, sin condiciones trampa ni cartón. La mitad del bar, españoles ávidos de pillar cacho, la otra mitad, Erasmus hablando en inglés entre ellos. Me alivió bastante la conciencia ver que entre ellos no hablaban en español, mejorando entonces que nosotros lo hiciéramos en Bruselas. Es cierto que al menos hablan en inglés, pero es que claro, hablar en danés o en sueco puedes hacerlo con los otros dos Erasmus que hay, pero español con los doscientos que te rodean. Aunque es probable que al acabar el año hablen mejor que nosotros el francés en su momento.

Al rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe con un
Olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé.

domingo, 9 de septiembre de 2007

Una noche de Guitar Hero II

Increíble. Ayer nos pasamos la noche tocando la guitarra en casa de un par de amigos que nos invitaron a ir a cenar con ellos. Después del espectáculo tan apabullante de nuestra selección de fútbol a la zaga del gol del empate con Islandia, enchufamos la Xbox.

Soy bastante reacio a pasarme la noche con una consola pudiendo ir a cualquier garito con música y gente de carne y hueso, pero cuando enchufaron la guitarra de plástico y cada uno de nuestros anfitriones tocaron la primera canción, todos quisimos probar. Probar, y probar y probar... A las 4 de la mañana aún seguíamos, por escrupuloso y ansiado orden, saliendo al escenario, entre vasos de calimocho y litronas de cerveza, engachados a la pantalla y a la combinación de colores que te indica cómo ser una estrella de las cinco cuerdas.


La guitarra de plástico tiene cinco botones en el mástil, de cinco colores y que sustituyen las cinco cuerdas, y un botón en su parte inferior que se debe pulsar cada vez a modo de rasgado. En su parte inferior hay una palanca con la que se puede añadir el efecto de distorsión a la canción. Una cosa simple pero realmente adictiva.


Como muestra, en youtube aparecen vídeos de chavalines ( de 5 y 8 años) dominando el tema. Joder, entonces esto se puede hacer.


En la pantalla, en función de la canción y el nivel de dificultad, aparecen una sucesión de órdenes de colores que hay que tratar de repetir con el mayor acierto sobre tu instrumento de plástico. Si eres bueno te aplauden y te jalean, si eres malo te abuchean, y si eres horrible y tus dedos son morcillas no dejarán que acabes ni la canción. Risas y miedo escénico asegurados cuando tocas tus canciones favoritas. Yo pasé muy bien el primer nivel, con sólo tres 'notas'. En cuanto tuve que pasar a tocar con el dedo meñique fue horrible. Toda una gira cancelada y contratos millonarios a la basura por comerme todas las teclas azules. Ahora sé qué dedo puedo cortarme sin que lo eche de menos. Para ser novatos y estar bebiendo continuamente no creo que lo hiciéramos mal. Carlos y Fernando, éste último que empezó además flojo, acabaron tocando con cuatro colores las canciones del grupo VI (de 8 grupos de dificultad). Un vicio, insisto, que se decidió que acabará como (auto)regalo de cumpleaños para un hermano pequeño.


La pena fue tener que volver andando, desde la Jota hasta el Coso, porque el Búhobus iba a tardar. Allí cogí el 33 hacia Las Delicias y, ya en el bus, una treintañera me preguntó si podía orientarla, porque hacía tiempo que vivía en Barcelona y no sabía bien si estaba perdida o no. Empezó a hablarme de la fiesta en la que había estado y a preguntarme por mi noche. Llegando a mi parada, me preguntó si vivía solo y cuando eché balones fuera (nada hay tan fácil como decir que vives con tus padres para que se apague el Etna) me deseó muy buenas noches, que descansase bien y me guiñó un ojo.


Malditas groupies.

viernes, 31 de agosto de 2007

29 de agosto

Me encantan esos días que se suponen grises y que se vuelven mejores conforme pasan las horas.
Hace dos días tuve la idea que necesitaba para sacar datos útiles en el proyecto. Fui a la universidad dispuesto a seguir buscando la relación mágica que necesitaba entre tablas y tablas de datos. Cuando digo buscar, me refiero a mezclar fórmulas y ver los resultados, intentando descubrir si son útiles o hay que probar otra cosa, una modo de proceder que sólo significa que día a día, y conforme eliminas posibilidades, te acercas a las pavorosa conclusión de que a lo mejor no existe lo que buscas y el proyecto no tiene salida. Y sin embargo, la idea feliz llegó. Es de esas cosas que cuando las ves dices "joder, es evidente ¿no te habías dado cuenta antes?". Pues no, no llevo malgastado más de un mes por gusto, y las gráficas inútiles que hice sirven ahora para apoyar que el nuevo método va por el buen camino. Es lo que necesitaba saber. Claro que ahora tengo otros problemas derivados para poder trabajar como necesito, pero al fin veo dónde tengo que llegar y cómo. Me queda proveerme de los datos que necesito y avanzar.


Además vi Harry Potter, la buena, la de verdad, que terminó de descargarse esa mañana, y esta vez no era pornográfica. La calidad de la imagen dejaba bastante que desear, pero como no soy fan y me ahorro 5 euros merece la pena.

Al mediodía me mandaron un mensaje los dos Erasmus franceses que han venido a Zaragoza y pude, al fin y para variar, quedar con alguien nuevo a tomar algo. Ellos quedaron a su vez con una chica alemana que conocieron en el albergue, que junto conmigo, éramos toda su lista de contactos en la ciudad después de cuatro días. Eso favorece que pueda ser un contacto habitual al ser de sus primeros conocidos. Y aunque me resulte raro conocer el mundo de los Erasmus en casa, no voy a negar que me intriga y me apetece conocerlo. Si a eso añadimos que puedo hablar francés en casa, lo que no he hecho en años, creo que tiene mucho de bueno.

lunes, 20 de agosto de 2007

Jaca

El viernes, cuando estaba de camino, me llamó Héctor para ver qué hacíamos a la noche. No sé tú, pero yo me subo a Jaca el fin de semana, así que vente si quieres. Y eso hizo, subió el viernes a la noche y nos fuimos de fiesta. Conocí a dos franceses de Compiègne, Loic y Helène, que estaban haciendo un curso de español en la Universidad de Verano y que en septiembre irán a estudiar a Zaragoza, al Centro Politécnico Superior (CPS), así que les di mi número de teléfono. La verdad que si estoy por Zaragoza ya tengo con quién hablar en francés, algo que en verdad me mola. Y bueno, nunca está de más conocer a alguien que pueda introducirte en una fiesta Erasmus en tu ciudad.

El sábado Héctor se fue con sus padres a Tramacastilla, y yo me subí al Portalet, en la misma frontera con Francia, a visitar a mis exjefes de hace dos veranos. Estuve trabajando en una bodega/bar/tienda de alimentación un mes. Subí unos tres cuartos de hora antes de la hora de comer, y ¡oh, sorpresa! me invitaron a sentarme a su mesa. Jejeje. Pasé la tarde allí y me regalaron dos botellasde vino. Vamos, que serían mis jefes, pero teníamos un trato familiar muy agradable.


A la tarde estaba muerto y sin un duro, así que decliné amablemente la invitación de los franceses para salir por ahí (pero es un detalle elegante, empezamos bien una nueva amistad :P). Una mañana de domingo de sol, lectura y piscina, y después de comer, vuelta a casa. Mis padres vuelven también, para quedarse. Se acabaron definitivamente los días de verano. Enseguida esto va a ponerse patas arriba.

Uf, uf, uf.

viernes, 17 de agosto de 2007

Proyectistas

Aquí están: dos de mis ex-visitas, en la misma terraza Sangenis, en Zaragoza. Quiero decir, en la
misma terraza que sale últimamente en las fotos. Sólo me queda por sacar a Nacho y ya estamos todos.

Los proyectistas, el título del momento, y no suena nada mal, que nos ha costado un rato llegar hasta aquí. Inreíble. No tenemos nada que estudiar para septiembre, ni que pedir apuntes (más bien devolverlos, Carlos, que te has dejado en mi coche un kilo de papel, alma de cántaro) ni que ir a la biblioteca a pelearse por un sitio, si bien el año pasado ya no había problemas, ni suspirar en una fila de revisión de un examen, ni pasarte una semana 'creyendo' que puedes aprobar pero no estar nada seguro, ni intentar resolver una cosa que jamás creías que podrían preguntar, podemos tirar las hojas de papel reciclado de los departamentos, dejar de escribir fórmulas en la HP, en las mesas, en formularios o en papiros con caligrafía minúscula. Ya ni siquiera podemos copiar del de delante o del de al lado, porque no tenemos nada que copiar. Como dijo mi catedrático de Construcciones, "más vale copiar bien que concebir mal", refiriéndose, lógicamente, a edificios industriales. Eso sí, si te pillan, es que no copias bien, y por tanto no hay excusa válida.

El fin de semana pasado, quizá un poco más, estuve en San Sebastián, y este creo que voy a subirme a Jaca y a visitar a mis ex jefes en el Portalet, donde trabajé hace un par de veranos. Buen viaje a los que os vais por ahí también, y un saludo a los que están en su casa, o los que están, de nuevo, en Bruselas. Esos me dan una envidia tremenda...

lunes, 6 de agosto de 2007

Madrid

Fue imposible contactar con Rafa, que tiene secuestrado su móvil por una desconocida al no haber encendido el teléfono en diez meses. No volvió el jueves a la noche, sino el viernes, y no leyó ni un sólo correo de los que le envíe. Así que cuando llegué, invitado por él, a Madrid, fue Julio quien vino a recogerme. Y a darme de cenar, alojarme y llevarme de fiesta. Las leyes que rigen en agosto rigen en fiestas del Pilar. Uno será recibido con palmas y salvas en su honor, el otro recibirá una bolsa de cacahuetes y una manta vieja.
El viernes quedamos con Macarena y una amiga suya, con Jorge (el primísimo) y dos amigos suyos, y con un amigo de Julio. No pasé de ver más de tres sitios (Tupperware, Vía Láctea e Independance) pero nos dieron las seis de la mañana. Corrieron copas, ríos de sudor (sobre todo en la última sala) pero lo mejor la música. Garaje, pop, electrorock, brit, oldies, hypes continuamente mezclándose. Nos acordamos de ti, Javi, intentando adivinar si os habríais cruzado alguna vez en esta clase de sitios sin conoceros.
Apenas dormí cuatro horitas porque no podía más del calor que ha hecho (si Sevilla tiene un color especial debe haberse evaporado este fin de semana) y me levanté a desayunar. Como Julio tenía comida familiar, quedé con Rafa a las dos de la tarde, decidido a tomar su ofrecimiento como guía y esclavo después de la falta de coordinación del fin de semana. Tres horas y media andando bajo el fuego, qué espanto. Ni siquiera crucé de acera delante del Palacio del Congreso, porque nosotros estábamos a la sombra, pero los leones tenían pinta de estar calentitos como para acariciarlos.
Esta vez vi lugares de la ciudad que no están en el "Recorrido Manifestación Modelo Grandes Multitudes". Aunque por ellos también pasé: en tres horas se puede andar mucho. Y sudar también. Nos compramos tres botellas grandes de agua, un par de cervezas y lo único que conseguimos fue el efecto doblemente perjudicial de tener sed y ganas de mear.
No he hecho apenas fotos, una veintena en los tres días. La única foto en que aparezco durante este paseo por el infierno es la del Palacio de Oriente, y el único monumento que tengo fotografiado es el Palacio de Oriente. Deduzcan cuántas fotos hice.

Cené en casa de Rafa, y su madre nos sacó amablemente unas cervezas frías. Quedamos después con Julio, Macarena y Pilar. Estuvimos en una terraza en Malasaña hasta la una y media, y cuando Macarena y Rafa se fueron a casa, pues ambos salían de viaje el domingo por la mañana, los tres fuimos a tomar una al Tupperware. Había dormido cuatro horas y paseado al sol tres horas y media, así que se me cerraban los ojos de sueño y cansancio, literalmente, pero fue entrar al Elástico y nos volvieron a dar más de las seis. Vaya música. Quizá demasiados chicos bizarre, de estética confusa y orientación más confusa todavía (no cuento nada más) pero un ambiente genial. ¡Y una climatización que funcionaba! (Aunque parezca machacón, ha hecho un calor horrible, y personalmente lo detesto).



Despertamos para ver la fórmula 1, y de la noche a la mañana Alonso pasó de ser primero a ser sexto. Vimos la carrera sin saber que había pasado, deseando que Hamilton perdiera una rueda o se le cruzase una paloma en pleno recorrido, pero nos quedamos con las ganas. Siesta, recoger la casa, café, papas bravas y al bus, de vuelta a casa.

Me he pulido medio presupuesto del mes, qué desgracia. En verano y así andamos. Así que "vuelta a casa" es bastante literal, a encerrarme con llave y no gastar (porque no puedo). La próxima, en Villanueva del Tortón de los Perales, que seguro que la música no me cuesta tanto dinero (aunque seguramente, tampoco valga la pena que pague por ella).

jueves, 2 de agosto de 2007

Reencuentros

No es Bruselas, es Zaragoza. El primer encuentro con alguien de "allí", como si allí fuera la luna u otra dimensión. Jarras de cerveza en una terraza, con las maletas en la silla de al lado, un bol de pipas, uno de patatas, y mi acompañante más tostada que nunca. Es lo que tiene ir con los apuntes a la playa, que sólo los llenas de arena. Al menos le devolví uno de los dos sandwiches que me preparó el día que salí desde el aeropuerto. Aún me queda uno pendiente.
Y este fin de semana nuevo reencuentro en Madrid, aunque probablemente la broma no sea tan económica como salir por "allí" o por "aquí".

Por otra parte, es un placer redescubrir mis discos después de tantos meses fuera. Aunque pude llevarme una buena cantidad de música, era imposible llevársela toda. Tengo una cantidad no menos despreciable de música en el ordenador, y no tengo apenas sitio para guardar los cd's grabados, así que se me plantea un problema nuevo, puesto que no voy a poder comprarme en mucho tiempo disco alguno, y a su vez, nuevos álbumes van a ir acumulándose.